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Don Julio: El Parrillero Legendario de Puerto Madero que Conquista al Mundo

LA NACION

Hace más de treinta años, Puerto Madero era un proyecto en ciernes, un lienzo en blanco esperando ser pintado con la modernidad. Sus diques, sus dársenas y los imponentes muelles de ladrillo evocaban una Buenos Aires de antaño, una ciudad que lentamente se transformaba. En medio de este renacimiento, una parrilla surgió como un faro de sabor y tradición: Don Julio.

Desde 1994, Don Julio se ha convertido en un ícono gastronómico no solo de Buenos Aires, sino de Argentina y del mundo entero. Su historia es la de un sueño hecho realidad, el de dos hermanos, Guillermo y Gonzalo Torro, que decidieron apostar por la carne argentina de la mejor calidad, cocinada a la parrilla con maestría y pasión.

Un Compromiso con la Calidad: Don Julio no es una parrilla cualquiera. Su filosofía se basa en la selección rigurosa de proveedores, eligiendo únicamente carnes de razas Hereford, Angus y Aberdeen Angus, criadas en pasturas extensivas y alimentadas con pasto. La carne, madurada en seco durante al menos 21 días, alcanza una intensidad de sabor y una terneza incomparables. Esta dedicación a la excelencia ha sido reconocida a nivel internacional, siendo constantemente nombrada entre las mejores parrillas del mundo por prestigiosas publicaciones como The New York Times, The Guardian y Time Magazine.

Más que una Parrilla, una Experiencia: Don Julio ofrece una experiencia culinaria completa. El ambiente, con su decoración rústica y acogedora, evoca el espíritu de las parrillas tradicionales argentinas. El servicio es impecable, atento y profesional, guiando a los comensales a través de un menú que celebra la carne en todas sus formas, desde el clásico asado de tira hasta el entrañado, pasando por el bife de chorizo y el ojo de bife.

Un Imán para Celebridades y Turistas: La fama de Don Julio ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un destino obligado para celebridades, personalidades del mundo del espectáculo y turistas de todas partes del planeta. Desde actores de Hollywood hasta cantantes internacionales, todos han sucumbido al encanto de esta parrilla emblemática. La posibilidad de disfrutar de una auténtica parrillada argentina, con carne de primera calidad y un ambiente único, ha convertido a Don Julio en un lugar de encuentro para los amantes de la buena comida.

La Magia del Asador: El corazón de Don Julio es, sin duda, su asador, donde el maestro parrillero, con años de experiencia, domina el arte de cocinar la carne a la perfección. El control del fuego, la paciencia y la técnica son fundamentales para lograr un dorado crujiente por fuera y una jugosidad irresistible por dentro. El aroma a carne asada que emana de la parrilla es una invitación irresistible para disfrutar de una experiencia gastronómica inolvidable.

Si visitas Buenos Aires, no puedes perderte la oportunidad de visitar Don Julio. Es mucho más que una simple parrilla; es un símbolo de la cultura argentina, un homenaje a la carne de calidad y una experiencia culinaria que te dejará recuerdos imborrables. Reserva con anticipación, ¡la demanda es alta!